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domingo, 23 de julio de 2017

YO, DANIEL BLAKE. Seguridad social, una dudosa realidad



YO, DANIEL BLAKE



Título original: I, Daniel Blake 
Año: 2016
Duración: 100 min.
País: Reino Unido Reino Unido
Director: Ken Loach 
Guion: Paul Laverty
Música: George Fenton
Fotografía: Robbie Ryan
Reparto: Dave Johns, Hayley Squires, Briana Shann, Dylan McKiernan, Kate Rutter, Sharon Percy, Kema Sikazwe, Steven Richens, Amanda Payne 
Productora: BBC / BFI / Sixteen Films

Premios:
    2016: Festival de Cannes: Palma de Oro
    2016: Premios BAFTA: Mejor film británico. 5 nominaciones
    2016: Premios Goya: Nominada a Mejor película europea
    2016: Premios César: Mejor película extranjera
    2016: Premios David di Donatello: Mejor film de la Unión Europea
    2016: Premios del Cine Europeo: 4 nominaciones, incluyendo Mejor película
    2016: Festival de San Sebastián: Premio del público
    2016: British Independent Film Awards (BIFA): Mejor actor. 5 nominaciones






“No acaricies mucho a un círculo porque se volverá un círculo vicioso”
“La cantante calva”
Eugene Ionesco


Dos aspectos de la película. Uno de ellos, quizá el más impactante, la cuestión de la seguridad social en el mundo desarrollado, o mejor dicho, en países como el Reino Unido, está mal, es inhumana, displicente y expulsora. El PAMI y ANSES, ambos de nuestro país, no están lejos de este panorama. Los afiliados y beneficiarios son tratados con indolente corrección, pero los métodos y sistemas, o sea, la lógica de los procedimientos no los benefician. Pero este no es el tema de esta nota, se trata de Daniel Blake, un carpintero de 59 años, con problemas cardíacos, tratando de iniciar los intrincados trámites para una pensión por discapacidad, o bien una ayuda para desempleados. 
El otro aspecto que merece ser mencionado, formal desde el punto de vista narrativo, pero sustancial desde la mirada de la esencia de esta historia destinada a mostrarnos cómo se maltrata y a veces se manda a la muerte a un hombre, como tantos que transitan y pululan por la gran ciudad, en medio de contradicciones y mecanismos legales que evaden o ignoran el riesgo de muerte del individuo con problemas que teóricamente debiera ser ayudado a resolver. El hecho es que la seguridad social no remedia nada. 




Pero para describir esta dura realidad su director, Ken Loach, apela, en cuanto al recurso narrativo, a Ionesco y a Kafka, al menos en las dos primeras partes. En el arranque de la historia, Daniel gira vanamente sobre las dificultades burocráticas, insensatas y absurdas de la supuesta seguridad social; en la segunda el desaliento de las permanentes y continuas dificultades y requisitos empieza a invadir el ánimo del protagonista que ve la solución cada vez más lejos, casi ya inalcanzable. Estas dos partes de la desatinada y kafkiana historia, conforman por sí mismas ejemplares fábulas acerca de la irracionalidad y deshumana condición que muchos sistemas y personajes imprimen a sus acciones frente a la vulnerabilidad de enfermos y afiliados de esos engranajes. Por supuesto, podemos seguir hasta el infinito, con ejemplos de casos reales, y colmar esta historia hasta hacerla el verdadero manual del desaliento y la impotencia. El valor estético y narrativo del film, está en su discreto y medido tratamiento, pero lleno de verosimilitud y realismo, valores frecuentes en el cine de Loach. Otras obras, de su filmografía, han incursionado con mucha valentía y autenticidad, en cuestiones que sobresalen por la inclemencia de las sociedades más evolucionadas del planeta. 
El tratamiento “neorrealista” y directo, no precisamente muy metafórico, de víctimas y protagonistas de hechos desgraciados, trágicos, marcó una forma cinematográfica de contar con crudeza y sin tapujos la realidad de nuestro mundo, en especial el Reino Unido, o la Europa colonialista e imperial. País que fue la cuna del "British Social Realism", también llamado “free cinema”, un movimiento cinematográfico, con realizadores, como Karel Reisz, Tony Richardson, Lindsay Anderson, Joseph Losey, Richard Lester, entre otros, a principios de los años 50 del siglo pasado, que se percató de la artificiosidad y banalidad del cine hecho en Hollywood, y la necesidad de retratar los años de pena y sufrimiento de la post guerra, llenos de ira y violencia. 



Sobre este legado, y en el actual contexto social, cultural y político, Ken Loach hace su cine.  Sus personajes transitan este mundo como pueden y enfrentando instituciones con sus peculiares relaciones humanas que son ni más ni menos producto enfermizo y tragicómico de la decadencia y el disparate social. Las relaciones interpersonales que se entretejen, la solidaridad que a veces emerge, y la desconfianza e ignorancia emocional, configuran hombres y mujeres anónimos, casi siempre, al borde del colapso y las acciones más disparatadas. Es que para Loach no hay salida sobre estas bases político-institucionales, ya que pergeñan una cultura y una psicología individualista donde la salida tiene que ver más con un trágico final que sobre el “happy end” al que nos tiene acostumbrados la gran industria del cine que ha inundado nuestras pantallas, al menos las pocas que quedan.
Por supuesto, el neorrealismo italiano es el padre de este movimiento. Quizá uno de los más importantes de todos los tiempos, De Sica, Rosellini, Visconti, Rossi, y otros directores, crearon verdaderas obras maestras sobre los devastadores efectos que produjeron sobre la sociedad de gran parte del mundo, las monstruosas guerras mundiales del s. XX. Hasta tal punto, que hasta el cine norteamericano alteró conceptual y formalmente su gran industria protectora del sueño americano.
El cine del Reino Unido no fue ajeno a este fenómeno, y “Yo, Daniel Blake” es un fiel reflejo, duro y cruel, tan duro y tan cruel como “Ladrones de bicicletas” o “Roma, ciudad abierta”.

Hector Correa
Punta Alta, julio de 2017

martes, 14 de febrero de 2017

EL CIUDADANO ILUSTRE. Un viaje kafkiano al terruño



EL CIUDADANO ILUSTRE

Un viaje kafkiano al terruño


". . . Si en todas partes del mundo el hombre es hijo de la tierra, en Las Hurdes la tierra es hija de los hombres"
· Miguel de Unamuno ·

Las Hurdes empieza donde acaba la fantasía del sueño. Parajes inundados de naturaleza, color y vida, que dan a la comarca una singularidad difícilmente irrepetible e inigualable. Entre valles y colinas, el sol y el agua dibujan paisajes de coloridos intensos en cada una de las estaciones, llegando a su máximo esplendor al eclosionar la primavera. Largos y espesos son los silencios que se extienden por la historia de esta comarca. Esto hace que sea un lugar de leyendas y tradiciones que sus gentes se resisten a perder en pro de una historia pasada y una identidad propia.


Ficha técnica:
Título original: El ciudadano ilustre.
Año: 2016
Duración: 118 min.
País: Argentina
Director: Mariano Cohn, Gastón Duprat
Guion: Andrés Duprat
Música: Toni M. Mir
Fotografía: Mariano Cohn, Gastón Duprat
Reparto: Oscar Martínez, Dady Brieva, Andrea Frigerio, Belén Chavanne, Nora Navas, Iván Steinhardt, Manuel Vicente, Marcelo D'Andrea, Gustavo Garzón, Emma Rivera
Productora: Aleph Media / Televisión Abierta / A Contracorriente Films / Magma Cine
Premios
2016: Festival de Venecia: Mejor actor (Oscar Martínez); nominado a Mejor film
2016: Premios Goya: Mejor película hispanoamericana
2016: Festival de Valladolid - Seminci: Espiga de Plata y Mejor guión
2016: Festival de La Habana: Sección Oficial de largometrajes a concurso
2016: Premios Sur: 9 nominaciones incluyendo mejor película y director




Cuando Luis Buñuel crea "Las Hurdes", en 1933, y sienta las bases del surrealismo antropológico en el género documental, no sólo le presta atención a las medievales condiciones de vida de sus pobladores, sino y en especial, a la resistencia que presentan ante la posibilidad de perder  historias pasadas y una identidad propia.
En esta historia de Duprat y Cohn, quizá el tema o el asunto que se observa y se destaca, no sea tanto el retorno del Premio Nobel de Literatura, Mantovani, como su efecto sobre los pobladores de este pequeño pueblo rural, ¡ojo! hablamos de una pequeña población de la extensa llanura pampeana bonaerense, y esto en alusión al origen de uno de sus realizadores, que, por otra parte es el autor del guión. Los que vivimos, nacimos y nos criamos, en un poblado así, de estas características, aún aquellas cercanas al Atlántico, reconocemos que así fueron y así son los caseríos que se encuentran desparramados por toda esta pampa, hoy semiabandonada, cuando no hace muchos años era surcada por el ferrocarril y no sólo por el transporte automotor. O sea, eran más prósperas y no tan conservadoras. Salas, que dicen que existe, en el norte de la provincia, es un cabal exponente de este proceso desertificador desde el punto de vista humano.




Las Hurdes (Cáceres), de Buñuel, es una pequeñísima aldea, totalmente aislada, del norte español, pobre, atrasada y muy misteriosa. Salas, un pequeñísimo poblado del norte de la Provincia de Buenos Aires, Argentina, con modos y costumbres, algunas extrañas, y profundamente conservador, pero muy precario desde el punto de vista moral y cultural. El film va adentrándose paulatinamente en ese estilo de vida como va cocinando algo extraño entre Mantovani y ciertos habitantes que pasaron de algún modo en una época remota de su vida, puesto que el protagonista nació y creció en el lugar.
Hasta aquí lo que todos hemos visto de la película. Los rasgos y perfiles pueblerinos que hemos hasta sentido de esta historia y del lugar donde se desarrolla.
 Creemos que conceptualmente la obra tiene otro costado, aún más profundo y terrible. La complejidad que se va apoderando del cuento, primero con “La invitación”, que es su primer capítulo, por la cual se conecta la autoridad municipal para que realice el viaje desde España, luego con “Salas”, segundo capítulo, “Irene”, tercer capítulo, “El Volcán”, cuarto capítulo, y “La cacería” quinto y último capítulo, junto con el prólogo –la premiación en Estocolmo-,  van conformando un verdadero laberinto físico y emocional, donde se mezclan aspectos tenebrosos encarnados en personajes aberrantes, y situaciones absurdas, ridículas y desagradables, incomprensibles desde su punto de vista (de Mantovani), pero muy naturales para los habitantes de Salas. Esta mirada, un tanto aturdida, donde los hechos o las acciones de los personajes están recubiertos de los rasgos típicos del teatro del absurdo, y el clima clasustrofóbico del pequeño pueblo transitado por personajes sacados de una galería psiquiátrica, donde el protagonista entra en conflicto existencial para entender las ridículas situaciones, tal como Kafka elaboró a través de Sr. K, ayuda a creer que “El ciudado Ilustre” se entienda como un obra metafórica, simbólica, llena de miradas irónicas y tragicómicas. No sabemos si lo kafkiano emerge por una decisión de hacer una obra crítica de la realidad de ciertos sectores impregnados de hipocresía y falsa apariencia, o bien, volvemos a caer en el costumbrismo y en la pintura local por una mera intención de mostrar lo grotesco de una sociedad decandente en vías de desaparecer. No hay duda que lo kafkiano se encuentra en ambas, donde lo real y lo ficticio se mezclan y entrecruzan permanentemente. Si esta es la intención, tenemos antecedentes extraordinarios en Haneke ("La cinta blanca. Una historia infantil alemana", 2009), en Polanski (Venus in Fur, 2013), en los hermanos Coen (Fargo, 1996, No es país para viejos, 2007) y en Lars von Tier (“Dogville”, 2003). Todos films, por citar algunos, que de una u otra manera se insertan en la problemática del origen histórico de los grandes holocaustos, la violencia, y la hipocresía de los grandes discursos  morales que han pasado a la historia. Otros ejemplos: ”… informó el secretario de Seguridad Interior, John Kelly, sobre los arrestos hechos por agentes del ICE en Los Angeles, Chicago, Atlanta, San Antonio y Nueva York”. Según Kelly, esas personas "representaban una amenaza a la seguridad pública, a la seguridad de nuestras fronteras y la integridad del sistema migratorio de nuestro país".
Si esta película, desde este ángulo, y como obra cinematográfica, logra transmitir estas preocupaciones universales del hombre contemporáneo, es decir, si utilizó las herramientas estéticas y narrativas con el fin de reflejar los grandes males del mundo, del hombre como individuo, de la sociedad toda, independientemente del lugar donde se sitúe la historia y la profundidad existencial de los personajes; si los autores tuvieron como objetivo esta intención, la de describir en imágenes, habría que adentrarse en cuestiones técnicas, semánticas y del lenguaje propio del cine que, quizá, no hayan estado a la debida altura para abordarlos y así convertirse en una obra maestra. Nuestro propósito se centró en proporcionar algunas pautas, en llamar la atención sobre ella para que el espectador no la pase tan facilmente por alto, ni la ignore sólo por ser argentina.

Héctor Correa
Punta Alta, febrero de 2017






martes, 14 de octubre de 2014

CINEASTAS INTERNACIONALES ABORDAN TEMAS COMO LA RELIGIÓN, EL SEXO, LA POLÍTICA Y LOS VICIOS



Vargas Llosa y Peter Gabriel trabajan para la película "Words with Gods"Vargas Llosa será el curador de las nueve historias que dan vida a "Words with Gods"





MEXICO.- El Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y el músico británico Peter Gabriel se suman al equipo de Guillermo Arriaga para su película "Words with Gods".

Arriaga anunció el viernes la incorporación del escritor peruano como el curador de las nueve historias que dan vida a "Words with Gods" ("Hablar con Dioses"), mientras que el ex vocalista del grupo Génesis será el encargado de componer la música de entrada del filme, además del tema musical de cierre para los créditos y un cortometraje que acompaña a la cinta.

"Estamos muy agradecidos con la enorme generosidad de Mario Vargas Llosa y Peter Gabriel, quienes aceptaron gustosos formar parte de este proyecto que nos llena de tanta ilusión", dijo el escritor y cineasta mexicano en una rueda de prensa en la Ciudad de México.

"Nunca nos imaginamos que terminaríamos yendo al cine con Vargas Llosa, mucho menos que terminaríamos desayunando en la casa en Londres de Peter Gabriel. ¡Es en verdad un lujo!", añadió.

"Words with Gods" forma parte del proyecto encabezado por Arriaga "The Heart Beat Of The World", una iniciativa fílmica surgida en 2011 en Latinoamérica que incluye cuatro largometrajes dirigidos por un grupo de reconocidos cineastas internacionales que abordan los temas de religión, sexo, política y vicios.

Arriaga, postulado a un Oscar al mejor guion original por "Babel" (2006) y ganador del premio al mejor guion en Cannes por "Los tres entierros de Melquiades Estrada" (2005), relató que buscaban a una persona que hallara la forma perfecta de entrelazar las nueve historias de este filme mexicano.

"Queríamos que esa persona fuera un intelectual, así que elegimos a Mario (Vargas Llosa). Hablamos con él, luego nos reunimos, vio la película dos o tres veces. Después de ver las imágenes, se fue a su casa y por la noche me llamó para decirme que ya lo tenía resuelto", dijo el también director.

"No queríamos traer a un editor que sólo juntara las historias, debía haber una razón de ser, una lógica de por qué un corto y luego otro, y Vargas Llosa fue en definitiva esa persona que tanto buscábamos", agregó el productor Alex García, socio de Arriaga en este proyecto junto con productor el argentino Lucas Akoskin.

Arriaga recordó que el primer encuentro con Peter Gabriel sucedió en noviembre de 2011, cuando el británico visitó la capital mexicana para ofrecer un concierto en el Auditorio Nacional.

"Peter nos recibió en su hotel y se enganchó de inmediato con la idea de participar en la película. Platicamos durante horas, nos enseñó canciones, videos. De hecho, la película arranca con un video que hizo él", dijo.

El escocés Lorne Balfe, conocido por su trabajo en películas como "Sherlock Holmes: A Game of Shadows", "Kung Fu Panda 2" y "The Bible", fue el encargado de la música incidental de "Words with Gods", que se encuentra en plena etapa de postproducción.

Arriaga, cuyos créditos como guionista también incluyen "Amores Perros" y "21 Gramos", explicó que "Words with Gods" es un filme que abordará las diversas religiones en el mundo de forma respetuosa.



"La idea de hacer esta película es acercar a los seres humanos. Hay temas que nos han dividido y la religión ha sido uno de ellos. La religión tiene que ser un punto de encuentro, no de lejanía. Buscamos mostrar que aunque pensamos de manera distinta, no significa que no podamos entendernos", señaló el también autor del libro "El búfalo de la noche".

El proyecto cuenta igualmente con la colaboración del director español Álex de la Iglesia, el brasileño nacido en Argentina Héctor Babenco, el iraní Bahman Ghobadi, el israelí Amos Gitai, el serbio Emir Kusturika, la india Mira Nair, el japonés Hideo Nakata y el australiano Warwick Thornton.

"Buscamos que cada director que participa tuviera una cercanía con la religión que retrata en su trabajo. Mario Vargas Llora ordenó las historias de acuerdo al origen histórico de cada religión, le dio una cronología", comentó Arriaga. "Era difícil organizarlo, complicado, y casualmente ese orden también le dio cierto balance editorial".

Arriaga se sumó a la lista de realizadores que participan en "Words with Gods", donde abordará el tema del ateísmo. Adelantó que el cortometraje que dirigió, protagonizado por Demián Bichir, se filmó en formato de 35 mm, con locaciones en el estado mexicano de Veracruz. Las ocho historias restantes se rodaron en Australia, Brasil, India y Japón.

Sobre el actor mexicano nominado a un Oscar por su trabajo en "Una vida mejor" (2011), dijo que "el compromiso que mostró Demian fue mucho, porque lo puse a subir y bajar un cerro bajo una temperatura de 6 grados, recién había llegado de Tokio".

Los títulos de los otros tres largometrajes que forman parte de "The Heart Beat Of The World" son "Encounters", que estudiará el sexo como identidad, expresión y diferencia; "Into the Bloodstream", que reflexionará sobre la relación del individuo, las culturas y las sociedad con las sustancias que se ingieren, inhalan, beben o fuman; y "Polis", que sumergirá al espectador en la sustancia de la vida política.

14 de octubre de 2014

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domingo, 12 de octubre de 2014

DIÁLOGO SOBRE CULTURA Y RELIGIONES



Busca Arriaga diálogo sobre cultura y religiones - Grupo Milenio

11 de octubre de 2014

Busca Arriaga diálogo sobre cultura y religiones



El cineasta presentó la cinta 'Words with Gods' en el Festival Internacional de Cine de Chicago.

Guillermo Aarriaga presentó la cinta ‘Words with Gods’ en el Festival Internacional de Cine de Chicago. (CuartOscuro )

EFE 10/10/2014

Chicago 

El director y guionista mexicano Guillermo Arriaga presentó Words with Gods en el quincuagésimo Festival Internacional de Cine de Chicago, una película que fue creada para despertar en el público "un diálogo sobre cultura y religiones".

"De niños siempre nos dijeron que no se podía hablar en la mesa sobre religión, sexo, política o drogas", declaró a Efe en un a entrevista telefónica.

"Pero esos temas han sido superados, ya no podemos pelearnos sino que debemos encontrar puntos de encuentro para que nadie se a rechazado o muerto por su religión, preferencia sexual o política", agregó.

En su opinión, "tenemos que conocernos unos a los otros y dialogar", y con ese concepto ideó tres años atrás una antología qu e reunió a nueve directores y a más de mil personas.

"Fue un esfuerzo de una diversidad nunca vista en el mundo cinematográfico", expresó el cineasta que tiene en su haber produc ciones exitosas como Amores perros (año 2000), 21 gramos (2003) y Babel (2006).

En Words with Gods se abordan durante dos horas las relaciones entre las diferentes culturas y religiones, a cargo de "directores admirados por su visión autoral", pero también comprometidos o cercanos a lo que iban a tratar.

Al australiano Warwick Thornton le correspondió la espiritualidad aborigen, filmada en el desierto; el argentino -brasileño Héctor Babenco filmó sobre la religión umbanda en la ciudad de San Pablo y Mira Nair, de la India, lo hizo sobre el hinduísmo en Mumbai.

El director serbio Emir Kusturica abordó el cristianismo ortodoxo en las montañas de su país; Bahman Ghobadi, de Irán, se enf ocó en la fe islámica en Turquía, y el israelí Amos Gitai trabajó sobre el judaísmo y la integración multicultural en Israel.

El curador del proyecto fue el escritor peruano Mario Vargas Llosa, quien según Arriaga fue incorporado como "un pensador" pa ra ayudar a que los diferentes segmentos tuvieran "peso y sentido".

"Nadie mejor que un gran contador de historias, que le otorgó demás a nuestro trabajo un marco de análisis y crítica", dijo A rriaga sobre el ganador del Premio Nobel de Literatura de 2010.

El rodaje de la película en nueve países demandó un año y tres meses, a lo que se agregaron animaciones realizadas por la artista visual Maribel Martínez y la música compuesta por el inglés Peter Gabriel, de quien Arriaga destacó su "enorme humildad y generosidad".

Words with Gods se presentó recientemente fuera de competencia en los festivales internacionales de cine de Venecia y Río de Janeiro, y después de Chicago se verá el mes que viene en Los Cabos.

Arriaga dijo que antes de llegar a la difusión comercial de la película se realizarán exhibiciones para líderes religiosos, p olíticos, activistas sociales y universidades.

"Queremos crear una plataforma distinta, un boca a boca durante seis meses, para que la gente vaya a verla con un ánimo disti nto y salga con ganas de discutir y dialogar en el café o durante una cena", concluyó.

Insertado desde http://www.milenio.com/hey/cine/Guillermo_Arriaga-Words_with_Gods-Festival_Internacional_de_Cine_de_Chicago_0_388161485.html

sábado, 11 de octubre de 2014

VIOLENCIA. EL NARCOTRÁFICO VISTO DESDE DIVERSAS DISCIPLINAS




Confabulario retrata los perfiles de la violencia

Redacción| El Universal
CIUDAD DE MÉXICO | Viernes 19 de septiembre de 2014


Violencia. El narcotráfico visto desde diversas disciplinas.

Cine, narcocorridos y la despolitización de la novela policiaca mexicana en el número de este domingo
El tratamiento de los asuntos del narcotráfico en diversas disciplinas artísticas en México es el tema del próximo número de Confabulario, el suplemento cultural de EL UNIVERSAL.
Oswaldo Zavala, profesor-investigador de The City University of New York, escribe un ensayo sobre el fenómeno de "despolitización" de la novela policiaca mexicana reciente que trata asuntos del narcotráfico, en la que, a juicio del estudioso, no se registra críticamente la interacción y complicidad de narcos y autoridades.

Anna Kingsley, especialista de estudios latinoamericanas de Royal Holloway-University of London, presenta la trayectoria de la artista conceptual Teresa Margolles (Culiacán, 1963), quien ha utilizado restos de escenas en los que se han cometido actos violentos ligados con el narcotráfico para crear sus obras, por lo que se le ha acusado de transgredir normas éticas para tener éxito en el mercado del arte.

Ignacio M. Sánchez Prado, catedrático de Washington University at St. Louis, Misuri, analiza cuatro películas mexicanas producidas en la última década que han tratado el asunto del narco: Miss Bala, Heli, Salvando al soldado Pérez y El Infierno, y señala cómo estos filmes manejan una perspectiva pensada para las clases medias del país, en contraposición con las películas de los años setenta y ochenta que trataban el asunto del contrabando pero con una óptica dirigida a públicos provenientes de las clases bajas.

José Manuel Valenzuela Arce, investigador del Colegio de la Frontera Norte, presenta los cuatro momentos históricos del narcocorrido, y el diferente tratamiento que este tipo de música ha dado a la vida ligada al contrabando de droga, al tiempo que utiliza el concepto de la banalidad del mal, acuñado por Hannah Arendt, para analizar las letras de los corridos más recientes.


En la sección de crítica de artes, Mauricio Matamoros Durán reseña la película Días de venganza (Oldboy), dirigida por Spike Lee, basada en el filme de culto del cineasta coreaba Chan-wook Park, e Iván Martínez comenta el concierto de la Orquesta Philarmonia de Londres, y el del Trío Guarnieri de Praga, que tuvieron lugar la semana pasada en el Auditorio Nacional en el Palacio de Bellas Artes, respectivamente. Juan Hernández reseña el montaje de la obra Santificarás las fiestas, de Conchi León, que corre temporada en el Centro Cultural del Bosque de la ciudad de México.


cvtp

domingo, 20 de julio de 2014

EL FUTURO DEL CINE Y EL MUNDO ASIÁTICO SEGÚN LA OPINIÓN DE CRISTOPHER NOLAN





Entrelíneas
Muerte y resurrección del cine

Por Marcelo Stiletano

Faltan algo más de tres meses para el estreno global y simultáneo de Interstellar. El 6 de noviembre llegará a los cines argentinos esta fantasía espacial de Christopher Nolan, que de nuevo, como viene ocurriendo desde Memento, recuerdos de un crimen, y sobre todo a partir de su trilogía sobre Batman y El origen, despertará con toda seguridad fascinaciones y enojos al mismo tiempo.

Antes de que vuelva a hablarse de la destreza visual del realizador y de que a la vez reaparezca la desconfianza de muchos frente a sus disquisiciones filosóficas, Nolan se anticipó con otra invitación a la polémica, esta vez escrita y con su firma. En un artículo de opinión publicado el 7 de este mes en The Wall Street Journal, se enfrenta a quienes ya declararon la muerte del cine y augura su resurrección.

La nota se conoció en un contexto que parece darles la razón a los escépticos. En el verano boreal, momento en que Hollywood espera los mayores ingresos del año, la taquilla se desplomó con una baja del 20 por ciento respecto de igual período de 2013, con números todavía más calamitosos en el crucial fin de semana del 4 de julio.

Buscando culpas todos miran en primer lugar a Transformers 4, que encabeza la lista de franquicias, secuelas y continuaciones que no estuvieron a la altura de las expectativas. Fracasaron allí también otras apuestas a gran escala, como las nuevas aventuras del Hombre Araña, Godzilla y Cómo entrenar a tu dragón 2.

Pero al mismo tiempo, desde el otro lado del globo terráqueo, asomó con los mismos actores (y distintos números) la mirada más optimista del cuadro. Gracias sobre todo a la nueva aventura de Transformers, cuyo multimillonario presupuesto se vio respaldado en gran parte por capitales chinos, el gigante oriental compensa las pérdidas con un aumento del 22 por ciento en un año de sus ingresos por boletería. ¿También en el cine, como en tantas otras actividades, el eje de mayor influencia se irá desplazando inexorablemente hacia el Pacífico y hacia el mundo asiático?

En su análisis, Nolan también pone el foco en los números. Lo primero que señala es una verdad de Perogrullo: los estudios procuran minimizar costos y maximizar ganancias. Y esta dirección es la que los lleva, por ejemplo, a deshacerse definitivamente del soporte fílmico y cambiarlo por el digital. La diferencia de costos entre uno y otro, por pantalla, va de los 600 a los 80 dólares. De hecho, el artículo aparece acompañado de un cuadro en el que Hollywood calcula una ganancia del 5 por ciento anual, de aquí a 2018, gracias sobre todo a los ingresos en concepto de entretenimiento hogareño. Nolan nos dice que los ejecutivos de las grandes corporaciones del entretenimiento hoy tratan a las películas como torrentes de datos. De esta manera, a juicio del director, las películas recorrerían infinitas rutas virtuales bajo la acotada definición de "contenidos", mención que a primera vista aspiraría a jerarquizar sus valores, pero que en el fondo no hace más que "trivializar esas diferencias formales que siempre han resultado importantes para los creadores y para el público". Esos contenidos pueden llevarse, verse y escucharse en toda clase de plataformas móviles y pantallas, desde celulares y relojes hasta surtidores de estaciones de servicio. "Nos quieren hacer creer que los cines deberían reconocerse como una más de estas plataformas, aunque con pantallas más grandes y asientos con posavasos", explica.




No todo es igual, quiere decirnos Nolan. Y agrega: "La industria apunta hacia ese futuro bastante desalentador, un futuro que, aunque llegara, no duraría. El cine no se puede definir únicamente por la tecnología, ya que dejaríamos de lado otros elementos fundamentales muy poderosos: la atemporalidad, el viaje hacia otros mundos, la experiencia compartida de esas historias".

Conviene detenerse en este último punto, porque para Nolan (y no sólo para él) es el elemento crucial, el nudo de un planteo que desde una evaluación poco auspiciosa se proyecta hacia dimensiones mucho más optimistas. Dice el director que la experiencia cinematográfica que vivimos dentro de una sala es distinta, pero tal vez no lo suficiente como para darnos cuenta. Lo que señala es que, naturalmente, siempre estaremos dispuestos a invertir nuestro dinero en compartir las obras pensadas por los estudios y los realizadores para ser vistas, experimentadas y compartidas en un espacio común, el de las salas de cine (theatrical experience). "Muchos nos quejamos de los espectadores que molestan en las salas, pero a la vez sentimos una punzada de decepción cuando nos encontramos con un cine vacío, ¿verdad?", se pregunta.

Para Nolan, lo mejor está por llegar. "Los cines del futuro serán más grandes y más bellos que nunca. Invertirán en formatos novedosos que ya no se podrán clonar en nuestros hogares. Y así el público disfrutará de un producto exclusivo y los estudios volverán a entender el valor económico de sus historias y la importancia de escalonar la venta de sus productos", completa, en una suerte de renovada apología de un concepto que parecía envuelto en una crisis irreversible frente a esa tormenta perfecta generada por la piratería y el streaming: la idea de la primera ventana de una película en el cine y sólo en el cine.

Aplicando a su razonamiento la idea del tiempo circular que aparece en algunas de sus películas, Nolan vaticina esta suerte de relanzamiento desde un concepto circular del tiempo aplicado a la historia del cine. Dice que algo similar ocurrió cuando la televisión amenazaba por primera vez la hegemonía del cine y éste le respondió "con las pantallas panorámicas y el sonido multipista". Y que algo parecido pasará de aquí en adelante.

Tal vez Nolan aparezca envuelto en un optimismo exagerado y difícil de sostener. Pero en el camino encuentra más de un aliado. A. O. Scott, el gran crítico de cine de The New York Times, acaba de sugerir en su análisis de la magnífica El planeta de los simios: confrontación, que la interpretación de Andy Serkis como César, el líder de los primates, contribuirá como pocas a redefinir el sentido de la actuación cinematográfica en esta era digital. "La expresividad de su rostro y su lenguaje corporal son tan precisos que resulta casi imposible decir dónde termina su arte y dónde comienzan los exquisitos artificios creados como efectos especiales por la empresa Weta", señala Scott. Agregaría Nolan que sólo es y será posible apreciar ese virtuoso ida y vuelta en una sala de cine. Tal vez tenga razón...

Copyright 2014 SA LA NACION | Todos los derechos reservados
Fuente:
http://www.lanacion.com.ar/1711423-muerte-y-resurreccion-del-cine?utm_source=n_op_nota1

sábado, 8 de marzo de 2014

LA NOCHE DEL OSCAR Y UNA TOMA PARA LA NATIONAL GEOGRAPHIC



Autorretrato de grupo con señora





lanacion.com| Tecnología


Sábado 08 de marzo de 2014 | Publicado en edición impresa.



La compu

Autorretrato de grupo con señora


Por Ariel Torres | LA NACION

Twitter: @arieltorres


No tenía pensado volver a hablar de fotos esta semana. De hecho, otra columna estaba casi lista para el despegue. Pero entonces, el domingo a la noche, durante la ceremonia de entrega de los premios Oscar, una autofoto rompió el récord histórico de retuits, colapsó la red de microblogging y al mismo tiempo la consagró, mostró que alguien en Samsung tiene clarísimo cómo manejar el marketing digital, inspiró una incontenible cascada de imitaciones, ninguna ni por asomo tan lograda, y se transformó en un ícono de los tiempos. OK, ¿pero por qué?

Antes de bosquejar algunas teorías, varias salvedades. Primero, Ellen DeGeneres tiene 27 millones de seguidores; no es tampoco una sorpresa que haya logrado semejante repercusión. Segundo, tengo mis serias dudas de que la imagen haya sido tan espontánea como se pretende, y creo que eso no le resta mérito. Por el contrario, se lo añade. Las autofotos son lo opuesto a la espontaneidad; no hay nada más posado que una autofoto. Pero ya volveré a eso.

Tercero, no fue sólo Twitter. Fue sobre todo la TV. No sólo porque se vio por la tele el momento en que los actores se hacían el selfie, sino porque Ellen lanzó al aire la consigna de "que sea la foto más retuiteada de la historia". Con varios cientos de millones de espectadores en tiempo real, si una persona tan querida y carismática como Ellen pide retuit (RT, en la jerga), bueno, es raro que no llegue a los 3,3 millones que había alcanzado al cierre de esta edición. Lo digo porque se comparó el récord de DeGeneres con el inmediatamente anterior, el de la foto de Barack Obama y su esposa en noviembre de 2012, tras ganar la reelección como presidente de los Estados Unidos. Cierto, superó este récord, y eso es un dato revelador sobre el comportamiento de las redes sociales, pero no son fenómenos comparables.

Pero no fue solamente el avasallador poder mediático de la televisión en combinación con la ubicua red de los trinos lo que motivó su ascenso a la categoría del selfie más famoso de la historia. Fue la foto en sí, tomada en realidad por Bradley Cooper. La imagen es, desde muchos puntos de vista, excepcional. Éstos son algunos apuntes que fui tomando en la semana.

Es una buena foto

No tanto gracias al pulso de Bradley, aunque eso contribuyó, sino más bien a la abundante iluminación de que disponían allí, al pie del escenario, la foto no salió movida y quedó bien expuesta y en foco. Ya sabemos los lamentables resultados que se obtienen con un smartphone, si las condiciones de luz son pobres. No sé si alguien, rápidamente, la mejoró un poco entre que la sacaron y la postearon, pero está claro que el material de base ya era muy bueno. Al revés que las otras tomas que tuiteó Ellen esa noche, que, como mínimo, son olvidables. Aunque esto, vale la pena notarlo, no fue obstáculo para que alcanzaran niveles de RT demenciales. Esta imagen, movida, fuera de foco, casi seguramente disparada sin querer, tuvo casi 175.000 RT y más de 270.000 personas la marcaron como favorito.

Como pueden ver, en comparación, el retrato de grupo que tomó Bradley es una obra maestra. Y no sólo desde el punto de vista de la calidad de la toma.

Además, está bien compuesta

Como se sabe, en la ceremonia de los Oscar todo se ensaya, todo está minuciosamente guionado. Es improbable que este acto en particular haya quedado librado al azar. Después de todo, Samsung es uno de los principales sponsors del show. Creo que ni en sus sueños más locos los responsables de marketing de la compañía coreana imaginaron semejante éxito de taquilla en los ásperos e impredecibles medios sociales (sólo hubo un 8% de reacciones negativas), pero seguro que dejaron ciertas bases asentadas en un contrato. No tengo, sin embargo, ningún dato para confirmar si la idea de hacer autofotos fue de Ellen -como dijeron oficialmente-, de un despabilado productor del show o de un ejecutivo de Samsung. En todo caso, fue una idea brillante, como se verá luego.

Es asimismo improbable que los actores no supieran de antemano, con un alto grado de certeza, dónde debían colocarse para la foto. Una vez que Ellen los escoge, y estoy convencido de que esto también estaba preparado, cada uno toma una posición y allí se quedan. Con tantas celebrities juntas, era la única forma de evitar el amontonamiento caótico y hasta algún codazo salvaje; el ejemplo de Liza Minnelli, tratando de colarse en la foto sin éxito, demuestra que acá no había espacio para improvisar (incluso cuando cualquier actor es bueno en eso).

Pero ni todo el poder de Hollywood podía calcular cuál era el momento perfecto para sacar la foto o controlar al ocasional fotógrafo. Fue, en este punto, una verdadera, auténtica autofoto. Por eso hace honor a la estética selfie con rigor impecable. Calculada, pero informal. Desprolija, pero por lo fluida. Correctamente enmarcada, pero cero rígida. No sé cuántas veces la habrán ensayado. O si Bradley tiene nervios de acero y buen ojo para la autofoto. Lo que sí sé es que esas 12 personas son profesionales de la actuación; para ellos posar es una segunda naturaleza, y sin que se les note.

En todo caso, no sé si lo advirtieron, pero Jennifer Lawrence, Meryl Streep, Ellen DeGeneres, Bradley Cooper y Peter Nyong'o (el hermano de Lupita, ganadora del Oscar a la mejor actriz de reparto) forman un arco continuo de sonrisas, y ese arco parece a la vez dibujar a una sonrisa. Todos los de atrás, a su vez, mantienen una línea de rostros en un contrapunto notable. El único desubicado es Jared Leto, y, por supuesto, dentro de una autofoto eso parece perfectamente a tono.

Es una metáfora

En la imagen hay, además, una metáfora de las tablas, del escenario, y de los arquetipos que lo pueblan.

Ellen es la protagonista, gracias a su simpatía irresistible y su rol de anfitriona. Bradley es el segundo actor, que no sólo sostiene la cámara, sino que suaviza con su estampa más amigable la mirada de Ellen, una de las más intensas de la pantalla. Respecto de los demás, son el reparto, y sobre ellos se pueden elucubrarse mil posibilidades.

Por ejemplo, en una de las mejores posiciones de la imagen aparece Peter Nyong'o. Fama instantánea para el hasta entonces perfecto desconocido hermano de Lupita, ganadora del Oscar a la mejor actriz de reparto, que aparece atrás, eclipsada. Él se subió a último momento, igual que Leto. Éste por la izquierda, aquél por la derecha. Coreografía, se llama.

Están también el muchacho, la muchacha, el rebeldón guapo, el guapo veterano, la dama genial, una mujer bonita, Lara Croft y Kevin Spacey. Sigan ustedes, no soy bueno para interpretar ni sueños ni películas.

El eco y el reflejo

Como autofoto tiene, sin embargo, un valor mucho más importante, uno que, a mi juicio, fue clave para que alcanzara una cifra tan descomunal de retuits.

Este autorretrato es en realidad un espejo. O, mejor dicho, es el espejo de un espejo. Porque, ¿qué es una autofoto? He leído docenas de interpretaciones, pero ahora que todos, quien más, quien menos, nos hemos sacado una, ya sabemos lo que se siente. En la autofoto uno es la estrella. Posás y buscás tu mejor ángulo (el izquierdo es el que prevalece, me enteré estos días), te mirás en display/espejo y decidís cuál es el instante perfecto para hacer clic. El selfie es la culminación del narcisismo. Después de todo, hace mucho que las pantallas reemplazaron al fatídico estanque.

La autofoto que tuiteó Ellen DeGeneres legitima esa pretensión. Estrellas que posan como nosotros, nada menos. La autofoto nos iguala, nos pone, como Twitter, a la misma altura. Pero no tanto, porque las celebrities son a la vez el reflejo que ve Narciso y el eco de la pobre ninfa.

Ni la más inspirada toma de la National Geographic, ni fotos que han ganado el Pulitzer, ni el gatito más tierno de todos los gatitos tiernos de Internet han logrado una fracción significativa de la cantidad de retuits de la autofoto de los premios Oscar 2014. El presidente del país más poderoso de la Tierra quedó atrás por 2,5 millones de RT. ¿Qué fue lo que ocurrió?

Creo que, como no podría ser de otra manera, esa noche el gran ganador del Oscar fue, una vez más, el ego..


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jueves, 14 de noviembre de 2013

LOS QUE LE DIJERON "NO" AL OSCAR. UNA ESTATUILLA MUY CODICIADA PERO TAMBIÉN MUY VITUPERADA. SÍMBOLO DE UN PODER OMNIPRESENTE





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Espectáculos
La carrera al Oscar
Los que le dijeron "no gracias" al Oscar

El galardón de la Academia de cine de Hollywood es deseado por muchos; otros, prefieren banalizarlo; mirá quiénes no lo aceptaron.
    
El Oscar es un premio como tantos otros. No obstante, lo asigna la mayor industria del cine en el mundo, es mundialmente conocido y su transmisión televisiva es cada vez más global. Esas características, sin embargo, no le hacen mella a quienes deciden decirle "No, gracias" a la estatuilla dorada.

Te contamos quiénes no lo aceptaron y quiénes prefirieron que les manden por correo el galardón.

1- GEORGE C. SCOTT Y LA OSTENTACIÓN

"¡Oh, Dios mío! El ganador es George C. Scott", dijo en 1971, Goldie Hawn, muy sorprendida, en plena entrega del Oscar a mejor actor. Es que días antes, George C. Scott ya había dicho que no le interesaba ser nominado, por lo que iba a ser retirado de la terna de nominados, pero al parecer los tiempos no dieron para que esto sea efectivo.

Scott había sido nominado por interpretar al tiránico militar estadounidense George S. Patton en el film Patton. Antes de que ir a recibir su premio, prefirió quedarse viendo hockey.

A la única ceremonia de los Oscar a la que asistió Scott fue en 1960, cuando por primera vez lo nominaron a mejor actor secundario por su participación en Anatomy of a Murder (1959). En el video (más abajo) lo podemos ver sonriendo a las cámaras (en el minuto 1:52), pero al parecer esa primera impresión más la idea que se haría haciendo de los premios a lo largo del tiempo, le bastaron para decirle no a los premios. "Son un desfile de carne y pura ostentación pública con trama de suspenso por razones económicas", sentenció.

En 1962 también fue nominado a mejor actor secundario por The Hustler (1960), pero se negó a la nominación.



2- DUDLEY NICHOLS, EL GREMIALISTA

Dudley Nichols fue el primero en negarse a ganar un Oscar. Nichols era guionista y había sido galardonado con la estatuilla en 1936 por la película El delator. No obstante, le dijo que "no" al premio debido a diferencias gremiales que tenía con la Academia de cine de Hollywood (Nichols era presidente del gremio de guionistas).

Más adelante, fue nuevamente nominado como guionista de las películas Hombres del mar (1940), Air Force (1943) y The Tin Star (1957).

Luego de esto, cambió de profesión, fue un periodista destacado del New York Post.


3- MARLON BRANDO Y LA VENDETTA

Su papel como Don Vito Corleone en El padrino le mereció un Oscar en 1973. Ya en 1955 había ganado y aceptado ese galardón por Nido de ratas (1954). Pero en esta segunda ocasión Marlon Brando no quiso aceptarlo y se lo comunicó a la Academia de Hollywood de una manera notable: envió a una activista siux, Sacheen Littlefeather, a leer su discurso de renuncia en el que argumentaba que no lo aceptaba debido al maltrato que los indios americanos recibían en el cine y la televisión de Estados Unidos. Por esto, afirmó que se sumaba a la causa de los siux en el oeste.

¿Por qué? En esos días centenares de miembros de los pueblos originarios de Estados Unidos y simpatizantes de su causa ocuparon el pueblo de Wounded Knee, que se encontraba en la reserva Pine Ridge, en Dakota del Sur. Los manifestantes pedían que el gobierno suspendiera el asesinato y el hostigamiento de partidarios del Movimiento Indígena Americano (AIM) y que se respetaran los tratados firmados entre hombres blancos y siux, ya que les habían "concedido la libertad para vivir" en los Black Hills, unas montañas de Dakota del Sur.


En respuesta, el gobierno envió 300 efectivos del Ejército de los Estados Unidos, agentes del FBI, miembros de la Oficina de Asuntos Indígenas (en inglés, BIA), mariscales federales y policías estatales. El sitio duró 73 días en los que se dieron varios enfrentamientos. Brando, el mismo día de los festejos del Oscar, se sumó a la toma del pueblo.

Es sabido el compromiso de Brando por causas sociales, no obstante el temor de la Academia a que la política (por fuera de las películas y sus intereses) se mezcle con los premios, el actor fue nominado más adelante.

Así, fue nominado por las películas Un tranvía llamado deseo (1951); ¡Viva Zapata! (1952); Julio César (1953); Sayonara (1957); Ultimo tango en París (1972); Una árida estación blanca (1989).




LOS GRANDES FALTAZOS

Sí, muchos de los que alguna vez ganaron un Oscar faltaron a la ceremonia con excusas que no incluían los problemas de salud.

Vacaciones
Katharine Hepburn ganó cuatro estatuillas durante su carrera, pero nunca asistió a la gran fiesta del cine. ¿Las razones? Su preferida era que no quería interrumpir sus vacaciones en Europa.

Amor por la pesca
John Ford, también con cuatro galardones, y tampoco recogió ninguno. Por ejemplo, cuando fue galardonado por el film The Grapes of Wrath, puso la excusa de que no podía ir porque estaba pescando.

Primero, el clarinete
Woody Allen es el gran ausente en los Oscar. Fue nominado 21 veces en toda su carrera y sólo asistió en 2002 para rendirle homenaje a Nueva York tras el atentado del 11-S.
También, faltó cuando ganó su primer, y hasta ahora único Oscar por mejor director. Fue en 1978, cuando su film Annie Hall se impuso sobre Star Wars que previamente había arrasado en varias categorías. El argumento de Allen para no asistir: se olvidó de ir pues estaba tocando el clarinete. (En 1987 ganó otro Oscar por Hannah y sus hermanas (1986), en la categoría mejor guión escrito para cine).

Oscar... ¿qué?
Los Oscar honoríficos se dan por fuera de la ceremonia tradicional que es transmitida en los medios con el glamour de la alfombra roja. Más allá de eso, en 2010, Jean Luc Godard no aceptó ir a la entrega del galardón debido a que no tenía ganas de viajar y a que realmente no le interesaba ser reconocido por Hollywood. A través de su mujer Anne-Marie Mieville, el director se expresó: "No son los Oscar de verdad. Jean-Luc no irá a América, se está haciendo viejo para este tipo de cosas. ¿Viajaría usted ese trayecto por un pedazo de metal?".

Pueden ir a la nota del diario si siguen este link:

http://www.lanacion.com.ar/1446658-los-que-le-dijeron-no-gracias-a-el-oscar

sábado, 26 de octubre de 2013

EL CINE DE HOLLYWOOD SEGÚN MICHAEL HANEKE

Haneke alerta de los peligros del cine por su capacidad de "manipular" al público
25/10/2013 -EUROPA PRESS, OVIEDO





Durante la entrega del Premio Príncipe de Asturias de las Artes, el director y guionista de cine austriaco Michael Haneke, ha hecho este viernes una profunda reflexión acerca del cine actual. Ha advertido de sus peligros, porque "ninguna forma artística es capaz de convertir tan fácil y directamente al receptor en la víctima manipulada de su creador como es el cine".
"El cine es un medio de avasallamiento", ha dicho Haneke en su intervención en la ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias 2013 en el Teatro Campoamor de Oviedo. Ha argumentado que el séptimo arte ha heredado las estrategias efectistas de todas las formas artísticasque existían antes que él y que las usa eficazmente. "En eso radica la fuerza del cine y su peligro", ha advertido.
Por eso, ha insistido en la necesidad de que los autores tomen "en serio" a los espectadores. "Un autor que no toma en serio a su socio, el receptor, de la misma forma en que él mismo quiere ser tomado, no tiene un interés real en el diálogo", ha explicado.
De esta forma, ha insistido en la responsabilidad a la hora de afrontar el proceso. "¿Quién asume esta responsabilidad? ¿Surge la fundada desconfianza de aceptar el cine como forma artística de esta responsabilidad tan frecuentemente no asumida? ¿La manipulación no es lo contrario de la comunicación? ¿Y no es la comunicabilidad y el respeto ante el tú del receptor una condición básica para poder hablar de arte en general? ", se ha preguntado ante los asistentes.
"El cine, con su peligrosa eficiencia en temas propagandísticos, ha puesto en peligro el destino de miles de personas", ha señalado. Para Haneke, la manipulación que se puede lograr a través del cine no es sólo para fines políticos, sino que también puede servir al autor dela misma para hacerse rico a costa de los espectadores.
ESTADOS UNIDOS
En su intervención, Haneke ha tenido tiempo para criticar el modelo del cine norteamericano, donde existe una "dictadura del mercado", en la que el éxito de una película se mide "exclusivamente en dinero contante".
Para el director de 'Amour', la situación en Europa no es muy distinta y sólo está aparentemente "amortiguada" por las subvenciones. En comparación con Estados Unidos, la influencia sobre las producción cinematográfica de las cadenas de televisión, que en Europa participan decisivamente en la financiación, es "un mal solo insignificantemente menor".
Todo ello viene derivado de la particularidad del cine, que es la más cara de todas las producciones artísticas, ha explicadoHaneke y, a la vez, "la más efímera y dependiente del mercado". Por ello, los realizadores se enfrentan a una realidad en la que "los errores no son tolerables".
"A ello se añade como agravante la competencia de los medios de comunicación de masas que con su trivialización de los criterios estéticos y de contenido, forzada por la dependencia del índice de audiencia, no representan precisamente una escuela audiovisual compleja para el público potencial del cine", ha comentado en relación a los actuales medios de comunicación.

Fuente:

Punta Alta, 26 de octubre de 2013

viernes, 4 de octubre de 2013

LOS JÓVENES NO VEN PELÍCULAS ARGENTINAS






Ver nota completa en www.pagina12.com.ar


Sociedad  |  Viernes, 4 de octubre de 2013

LA MITAD DE LOS CHICOS NO VIO PELÍCULAS ARGENTINAS EN EL CINE EN UN AÑO

Un cine en busca de jóvenes

El dato surge de una encuesta realizada por la Academia del Cine entre jóvenes de todo el país de 16 a 25 años. Los motivos: la falta de difusión, que no son tan entretenidas como las extranjeras y que son “en blanco y negro”.

“No hay tanta variedad como en el cine de otros países”, “no hay cines que pasen argentinas cerca de mi casa”; “las películas son en blanco y negro”. Esos son los argumentos –en algunos casos, prejuicios– de los jóvenes de 16 a 25 años para explicar por qué no van con frecuencia a ver films nacionales, según una encuesta que dio a conocer ayer la Academia de Cine. Los números son preocupantes: en el último año el 50 por ciento no vio ninguna película argentina en el cine y un 20 por ciento, ni siquiera en DVD o en TV. La institución, sin embargo, busca derribar preconceptos y salió a exhibir películas nacionales a públicos jóvenes de todo el país que, sorpresivamente, las recibieron cálidamente e incluso con aplausos.

“Quedé medio horrorizado con eso de que las películas argentinas son ‘en blanco y negro’, me dije ‘¡No saben nada!’. Los chicos dicen que necesitan películas que hablen de ellos. Eso lo que demuestra es desconocimiento, porque hay un montón de películas argentinas sobre jóvenes hechas por jóvenes. Ni se enteran y eso viene por el lado de la difusión. No lo conocen”, analizó el director de la Academia, el cineasta Juan José Campanella, durante la presentación de la encuesta donde compartió un panel con Santiago Mitre, director del film El estudiante, y el productor Axel Kuschevatzky.

El sondeo se realizó entre 1500 jóvenes de 16 a 25 años que participaron de la exhibición de películas argentinas entre noviembre de 2012 y julio de 2013, en las ciudades de Buenos Aires, Mendoza, Rosario, Córdoba y Ushuaia. A través de la iniciativa “Los jóvenes y el cine nacional”, los jóvenes asistieron a funciones de Un cuento chino, Infancia clandestina, Días de vinilo, La suerte en tus manos, Vino para robar y El estudiante con la presencia de los respectivos directores.

Los datos del relevamiento son duros en todo sentido. El 50 por ciento no vio ninguna película argentina en el cine en el último año y un 20 por ciento no vio films argentinos por ningún medio (cine, TV, web). Si no fuera por la TV este porcentaje sería más del doble (45 por ciento).

Entre los principales motivos por los cuales no ven cine nacional, figura que “no los atrapa” (90 por ciento), “no los entretiene” (85 por ciento) y que “no se enteran del estreno” (80 por ciento). Además, otros motivos señalan que las películas “son muy iguales” (45 por ciento), “no hay tanta variedad como el cine de otros países” (20), “no hay cines que pasen argentinas cerca de la casa” (20), “no encuentran alguien que los acompañe” y “las películas son en blanco y negro” (1,5).

Al respecto, Santiago Mitre destacó que hoy el cine nacional “tiene una mejor producción y es más valorado”: “Si esta encuesta se hubiera hecho en 1994 hubiera dado peor”. En tanto, Axel Kuschevatzky señaló que más adelante habría que analizar el impacto de los estrenos del mes de julio en adelante (Metegol, Corazón de León, Séptimo y Wakolda) ya que en el primer semestre del año el cine nacional había convocado a un millón y medio de espectadores y a esta altura de octubre ya ascendió a los 6 millones, mientras que en septiembre cuatro películas argentinas lideraron la taquilla.

En cuanto a la difusión, Campanella sostuvo que algunos directores pueden tener parte de la culpa pero que el apoyo de la TV es fundamental para que una película sea vista. “Yo, a comienzos de mi carrera no concebía el lanzamiento como parte de mi trabajo y pensaba que hacer el poster era un trabajo no creativo, pero hay creatividad en hacer la campaña, el trailer, el poster. Eso es quizás una deuda de nuestro lado. Por otro lado, la TV de aire sigue siendo importante: todas las películas más vistas de este año tuvieron apoyo de la TV.”

En este punto, los jóvenes coinciden. Consultados acerca de qué necesita el cine nacional, respondieron en primer lugar que más publicidad y difusión cuando las películas se estrenan (90 por ciento), seguido de que el argumento atrape (80) y que sea más divertido (80). Una respuesta suelta indicó: “Que se le vaya la mala fama porque últimamente está mejorando mucho”.

“La preocupación de la Academia es qué pasa con películas muy buenas como Infancia clandestina, Días de vinilo o El estudiante, por qué se quedan en los 100 mil espectadores. En las funciones con los pibes, éstos aplaudían y las festejaban cuando jamás las hubieran ido a ver al cine. Hay rechazo pero, una vez que se supera, la película argentina le gana al tanque estadounidense. Hay que analizar la fuente del prejuicio. Ver cine argentino parece como comprar un auto usado, lo tienen que probar 10 personas como para que uno se convenza. Con la estadounidense pasa todo lo contrario: si está Jennifer Aniston y se ve en el trailer que es mala se la va a ver igual”, opinó Campanella.

“Estamos tratando de quebrar el prejuicio de que el cine argentino es aburrido, malo, no en el sentido de mala factura sino aburrido por una cuestión de ritmo y de que siempre fue así –concluyó el laureado director–. Ahora estamos con un plan de restauración de cine clásico argentino bueno y popular. Logramos la Ley de Mecenazgo hace un año y conseguimos el dinero, ya que se trata de un proyecto de un millón y medio de pesos para tener el software y el hardware necesario para arreglar imagen y sonido y poder hacer exhibiciones por los barrios, los cines de la ciudad, el espacio Incaa, Internet, como sea y generar debates.”


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domingo, 4 de agosto de 2013

HIGH NOON. A LA HORA SEÑALADA. EL WESTERN EN LA BIBLIOTECA ALBERDI. UN CICLO IMPRESCINDIBLE



A la hora Señalada
"High Noon" (Solo ante el peligro)




"HIGH NOON", DEL DIRECTOR FRED ZINNEMANN, ES LA SEGUNDA PELÍCULA QUE SE PROYECTARÁ EN EL CICLO "LOS GÉNEROS EN EL CINE: EL WESTERN”  QUE HA ORGANIZADO EL CINE CLUB “DOS MIRADAS” EN LA BIBLIOTECA JUAN B. ALBERDI Y EL AUSPICIO DE SEGUROS RIVADAVIA. JUNTO CON LA DILIGENCIA (JOHN FORD) -YA PROYECTADA-, HIGH NOON (FRED ZINNEMANN –A LA HORA SEÑALADA- (1952), TEMPLE DE ACERO (HENRY HATHAWAY, 1969), Y SU REMAKE DE LOS HERMANOS COEN (2010), CONSTITUYEN MAGNÍFICOS EJEMPLOS DE OBRAS DE ESTE PRIMORDIAL GÉNERO CINEMATOGRÁFICO.

Se proyectará en la Biblioteca Alberdi el sábado 10 de AGOSTO a las 18 hs.


Ficha Técnica:
Dirigida por Fred Zinnemann, escrito por Carl Foreman, basada en el cuento "The Tin Star" de John W. Cunningham, director de fotografía, Floyd Crosby, editado por Elmo Williams y Harry Gerstad, música de Dimitri Tiomkin, diseñador de producción, Rudolph Sternad, producido por Stanley Kramer, publicado por United Artists. Blanco y negro. 85 minutos: Duración. Año: 1952

CON: Gary Cooper (Will Kane), Thomas Mitchell (Jonas Henderson), Lloyd Bridges (Harvey Pell), Katy Jurado (Helen Ramírez), Grace Kelly (Amy Kane), Otto Kruger (Percy Mettrick), Lon Chaney (Martin Howe) y Henry Morgan (William Fuller).



Un dilema ético y moral. “High Noon” es un clásico. Por supuesto, es un clásico porque ha provocado que técnicamente fuera contada, la historia, con una simplicidad y llaneza narrativa casi imposible de creer. Y porque detrás de esa sencillez logra mostrar que este mundo está colmado de cobardes y matones a la hora de jugarse por el bien común. La película narra que en el momento justo de su casamiento, y ya casi con la jubilación en la mano, Will Kane, ex sheriff (alguacil) de un pequeño pueblo, se entera que un grupo de delincuentes que han dejado la cárcel, llegan para vengarse, ya que fue él quien los atrapó. El drama, contado con elementos inteligentemente usados, pictóricos y semánticos, logra un clima muy especial si tenemos en cuenta que Zinnemann utiliza el tiempo real y cronológico en la sucesión de los hechos durante lo que en realidad se vive en el film, o sea en el tiempo fílmico. Es la historia, en su duración real, de un hombre que asume su valentía como un valor, un destino o un objetivo que va más allá de sus intereses personales para enfrentarse ante el peligro, lo que entraña una decisión ética y moral no aceptada e incomprendida hasta por su propia esposa.  No está exenta de poesía este cuento ambientado en el lejano oeste. La música, los planos fijos del pueblo y los forajidos, el sonido y la imagen del reloj, la mítica figura de Gary Cooper, los distintos personajes, y hasta la pávida y asustadiza actitud de los pobladores, todo contribuye dramáticamente a hacer en 80 minutos una de las obras más interesantes dentro del “western”. Categoría cinematográfica considerada como el género por excelencia en el cine de Hollywood, por sus temas, sus hombres, su cuota de natural violencia, sus paisajes, sus héroes, y por sobre todo, por su contenido épico, formal y conceptual. La historia de la conquista del oeste, o, lo que es lo mismo, la historia de la ocupación territorial de un continente, por el hombre “blanco”, es la historia de un país, la expoliación y la supresión de sus aborígenes, y el modelo de la llamada civilización occidental y cristiana.



Esta película será proyectada en el auditorium de la Biblioteca Alberdi, por el Cine Club “Dos Miradas”, en el ciclo “Los géneros en el cine: el western”, el día 10 de agosto a las 18 hs. La entrada es gratuita.


Héctor O. Correa
Punta Alta, agosto de 2013

domingo, 31 de marzo de 2013

DAS WEISSE BAND. EINE DEUTSCHE KINDERGESCHICHTE. LA VIOLENCIA GLOBAL O LA GLOBALIZACIÓN DE LA VIOLENCIA







Título: Das weisse Band - Eine deutsche Kindergeschichte. (La cinta blanca. Una historia infantil alemana / The White Ribbon).
 
(Austria-Alemania-Francia-Italia, 2009] [B/N, 149 m.].
 
Ficha técnica:
Dirección: Michael Haneke.
Argumento: Michael Haneke.
Guión: Michael Haneke.
Fotografía: Christian Berger (Blanco&Negro).
Música: Varios.
Producción: Stefan Arndt, Veit Heiduschka, Michael Katz, Michael Katz, Margaret Ménégoz, Ulli Neumann, Andrea Occhipinti
Productora: Les Films du Losange / Wega Film / X-Filme Creative Pool.
Reparto: Christian Friedel (el profesor), Ernst Jacobi (La voz del narrador), Leonie Benesch (Eva), Ulrich Tukur (El Baron), Ursina Lardi (Marie-Louise, la Baronesa), Fion Mutert (Sigmund), Michael Kranz (El Tutor), Burghart Klaußner (El Pastor), Steffi Kühnert (Anna, la esposa del pastor), Maria-Victoria Dragus (Klara), Leonard Proxauf (Martin), Levin Henning (Adolf), Johanna Busse (Margarete), Yuma Amecke (Annchen), Thibault Sérié (Gustav), Josef Bierbichler (el mayordomo), Gabriela Maria Schmeide (Emma, la esposa del mayordomo), Janina Fautz (Erna), Enno Trebs (Georg).
 
Premios.
- 2009: Nominada al Oscar a la mejor película de habla no inglesa
- 2009: Festival de Cannes: Palma de Oro (mejor película), premio FIPRESCI
- 2009: Globos de Oro: Mejor película de habla no inglesa
- 2009: Premios del cine europeo: Mejor película, director, guión. 4 nominaciones.

 
En un pequeño pueblo alemán -un año antes de la Gran Guerra del 14-, llamado "Eichwald", dominado por una férrea moral protestante, suceden extraños acontecimientos, muy violentos, que alteran su tranquila vida rural. El director del film detiene su mirada sobre distintos personajes, desde el pastor hasta los niños del coro, en la escuela, dentro de una galería de habitantes y funcionarios, parroquianos, hombres y mujeres de todo tipo, indagando sobre los responsables pero también preocupado acerca del origen de semejantes hechos, con el objetivo de explicar no solo los orígenes socio-culturales del nazismo antes de la Primera Guerra Mundial, sino "la violencia" de una Europa decadente y en crisis.

Héctor Correa
Punta Alta, abril de 2013


LA BIBLIOTECA ALBERDI Y EL CINE




Próxima función del Cine Club Dos Miradas, "El Cine de Michael Haneke", organizado por la Biblioteca Alberdi. Día 06-04-13 a las 20 hs.

 LANZAMIENTO DEL LIBRO  "EJERCICIOS CRÍTICOS SOBRE CINE" PRELUDIO  "El cine es la música de la luz”Abel Gance "Esta músi...